La pasta italiana además de ser deliciosa, es nutritiva y nos puede proporcionar beneficios si se consume de forma adecuada. Hay muchos países en donde la pasta es una parte importante de su menú y forma parte de su cultura, desde los adultos hasta los niños la consumen en sus diferentes versiones.
Es un platillo que se puede comer con diferentes salsas y combina con casi cualquier otro alimento. Incluso, puedes prepararla para cualquier ocasión y a cualquier hora del día. Pero detrás de esta comida que parece simple, hay una historia que quizás no todos conocen.
Hay muchas versiones que hablan sobre el origen de la pasta italiana, pero la más aceptada ha sido la que habla sobre Marco Polo y el descubrimiento de la misma en el siglo XIII. Los historiadores cuentan que Marco Polo realizó un viaje a China y fue allí donde encontró esté alimento y lo introdujo a Italia.
Este italiano jamás se imaginó que la pasta iba a adquirir tanta fama en su país. Con el tiempo surgieron más tipos de pasta italiana, salsas deliciosas para acompañarla y estudios que han certificado todos los beneficios de este alimento. Gracias esto, la pasta se volvió un plato consumido en todo el mundo.
Acompáñanos a conocer las propiedades nutricionales de la pasta italiana y todo lo demás que necitas saber sobre este delicioso platillo.
¿Qué ingredientes se necesitan para hacer pasta italiana?
La verdad es que la cantidad de ingredientes que se necesitan para hacer pasta italiana, son pocos. Aun así, hacer pasta casera consta de ciertos pasos y procedimientos que son necesarios para obtener un producto final de calidad.
Ingredientes:
· Harina de trigo duro
· Sal
· Huevos y una clara
· Agua fría
· Aceite de oliva
Preparación:
El secreto para obtener una pasta de calidad está en la harina que se emplea para hacerla y la más recomendada es la harina de trigo duro molida, de allí se obtiene la semolina que es perfecta para hacer pasta por lo que es más gruesa que la harina de trigo convencional.
Para comenzar, lo primero que debes hacer es tamizar la harina de trigo que hayas elegido, esto ayuda a que no se formen grumos. Luego de que tengas la harina lista, debes agregar el aceite, los huevo, la clara y mezclar hasta conseguir una masa espesa. Continuamente, vas agregando agua fría para que no quede muy seca.
Como siguiente paso, tienes que amasar. Para esto, debes espolvorear algo de harina de trigo en una superficie limpia y trabajar con las manos la masa hasta que no se te pegue (10 minutos aproximadamente).
Si ya la tienes lista, tienes que llevarla a la nevera durante unos 20 minutos, pasado este tiempo ¡lo que te queda por hacer es cortarla!
Beneficios de la pasta
Ahora que ya hablamos un poco sobre la historia de la pasta y cómo es su proceso de preparación casera, es hora que conozcas las propiedades nutricionales que este alimento le proporciona a tu cuerpo.
Es una gran fuente de carbohidratos
En una dieta sana y equilibrada no pueden hacer falta los carbohidratos, y la pasta italiana es una excelente fuente de los mismos. Este elemento nutricional es necesario en nuestra ingesta diaria, debido a que nuestro organismo produce glucosa por medio de la metabolización de los carbohidratos.
Es decir, obtenemos energía para realizar nuestras actividades diarias. Además, se debe destacar que es una forma más saludable de conseguir energía, puesto que consumir azúcares directamente, es más perjudicial para la salud. Asimismo, gracias a su bajo índice glucémico las personas diabéticas pueden consumir pasta sin problema.
No contiene colesterol
La pasta italiana no contiene colesterol y su porcentaje en grasas es muy bajo, por ende su consumo favorece a nuestro corazón. Incluso, puede formar parte de una dieta de adelgazamiento porque no engorda. ¡Puedes comer delicioso sin ganar kilos de más!
Rica en fibra, micronutrientes y vitaminas
Al consumir una buena porción de pasta italiana le proporcionamos a nuestro cuerpo fibra, lo que nos ayuda a tener una mejor digestión y evitar el estreñimiento. De la misma manera, sin darnos cuenta consumimos micronutrientes importantes que favorecen el funcionamiento óptimo de nuestro organismo, tales como el calcio, potasio, selenio, fósforo, etc.
Asimismo, la pasta contiene vitaminas como la E y del complejo B, las cuales favorecen la metabolización de los carbohidratos y la salud de nuestro sistema nervioso. Aparte de esto, recuerda que la pasta se puede comer con salsas y todas estas son hechas de vegetales que también contienen vitaminas y minerales, lo que la hace aún más nutritiva.
Tipos de pasta italiana
Aunque muchas personas no lo saben, cada clase de pasta italiana tiene un uso específico, cada una de ellas está fabricada y diseñada para emplearla en cierto tipo de platillo y aquí te contamos un poco sobre este tema.
Pasta larga: Un ejemplo de pastas largas son los spaghettis, tallarines, fetuccini, etc. El uso de la pasta larga normalmente es con salsas, como la boloñesa, salsa Alfredo, entre otras.
Pasta corta: Entre las pastas cortas podemos encontrar los rigatoni, macarrones cortos, tortiglioni, etc. Son especiales para acompañar con salsas densas, gracias a que su forma le permite mayor adherencia.
Pasta rellena: Los raviolis, tortellini y los ñoquis son algunos de los tipos de pasta italiana rellena más conocidos. Se pueden rellenar con queso, carne o incluso mariscos y se acompañan con una salsa ligera.
Pasta de fantasía o pastina: Es una clase de pasta de un tamaño pequeño y viene en formas muy variadas, como letras, estrellitas y fideos. Se usan generalmente para preparar platillos de sopa, pues su tamaño facilita su consumo.
Ahora ya sabes por qué la pasta debe formar parte de tu menú, es nutritiva, saludable y deliciosa a la vez. Puedes conseguirla en el mercado en diversas formas, longitudes y tamaños.
Además, existe una infinidad de recetas fáciles que puedes preparar en casa para disfrutar con toda tu familia y lo mejor de todo, es que su precio es totalmente accesible.